Durante años. Cipiustrina, soñó con tener una mesa para el jardín de las delicias. Una mesa de madera para poder sentarse alrededor de ella y disfrutar del placer y necesidad de alimento. Anoche se cumplió el deseo! Menos mal que en CasaRies estos días se encuentran unos "marines". Jóvenes llenos de alegría y buen rollo con unos músculos alucinantes. Entre todos cargaron la mesa, dirigidos por D. Indalecio que como siempre se presta a echar una mano solidaria.
Para dar la welcome a la table se preparó una parrilla.
Sonaron voladores y se escanció sidra.
Esta morning, al despertar, se asomó a contemplar el sueño hecho realidad.
Thanks Daddy!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario